lunes, 20 de abril de 2009

Buenos propósitos, pequeños fracasos.


Comienzo la semana con los buenos propósitos de todos los lunes: dejar de fumar, beber menos, hacer más ejercicio, medir 1,90, tener los ojos verdes y cumplir 30 años. En fin, tendré que plantearme objetivos más realistas: ahorrar para un Steinway, ir buscando dúplex de 200 m (cuadrados, se entiende, que no hay "elevado a la 2" en el teclado) ahora que los pisos están de oferta 2 X 1, rastrear por internet lo del descapotable clásico (no quiero ser el único descapotable de mi casa), ganar algún Óscar como secundario, que también están baratísimos, terminar algún relato de los que empiezo cada quince días, a ver si así puedo optar al Nadal o al Planeta, que igualmente están de saldo... En fin, un océano de oportunidades que se abre ante mis ojos, aún marrones claritos.

Tampoco estaría mal hacer algo como un coro, ahora que lo pienso, pero de poca gente, que luego hay facciones y empezamos con el bipartidismo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

los lunes todos hacemos buenos propositos, hasta yo me he levantado a las seis de la mañana para llegar al curro media hora antes...
bueno, lo reconozco, el motivo va algo mas alla del trabajo, es poder coger un p*t*o asiento en el tren y en el metro, tarea harto complicada.
un saludo Rob y animo con el blog de un granaíno desde leganés.