domingo, 24 de noviembre de 2013

MÁS ESTUFA, GERMÁN DÍAZ, DAVID HERRINGTON Y LOS GORDETTES

Aunque el título suena a totum revolutum, no hay tal, pues todo está relacionado como quedará patente al final de estas líneas, en este mi cuaderno, algo olvidado por cierto, pero que cuenta con un nuevo miembro al que doy la bienvenida y las gracias. 
El viernes pasado asistí a un concierto, extraordinario por estar fuera de la programación de La Estufa, y por la calidad de los intérpretes, mi zanfonero de cabecera, Germán Díaz, y el brass-man de la pérfida Albión, David Herrington. Una lira organizzata, o zanfona-órgano, más tuba y/o corneta inglesa de 1900 (no euros, como comentó alguien entre el público) constituyen una apuesta arriesgada, innovadora pese a la edad de tales instrumentos. Se agregó una caja de música mecanizada y durante dos horas, con el consabido descanso tradicional para el vino y las pastas y posterior sorteo de regalos, disfrutamos de un espectáculo original, interesante y divertido. No quiero parecer un crítico musical al uso, porque no es tampoco el cometido de mi blog, y además no sería objetivo al tratarse de dos amigos, por lo que recalcaré el hecho del también extraordinario ambiente que se nota en Los Conciertos de la Estufa. No sé por qué motivo, aunque intuyo que tiene que ver con el hecho de que Germán es allí una especie de ídolo y suelo acompañarle, pero cuentan conmigo para la cena posterior, y realmente lo paso en grande con los arrabaleros. Siendo de un pueblo alfarero, se nota que tienen muy buena mano para amasar el barro de la amistad.
¿Y los Gordettes? Para otra entrada.